Páginas

miércoles, 1 de septiembre de 2021

Unos días de descanso en Aragón...

Después de la ruta del Loira, llegó Aragón...

Aquí no había planes. Ni rutas. Ni horarios. Solo el "dolce far niente". 

Y que más se puede pedir de un lugar así, verdad?!

Os invito a seguir leyendo y lo entenderéis....


UN LUGAR LLAMADO OROEL

Jaca y la peña Oroel es un lugar muy especial y como no podía ser de otra manera, después de instalarnos en un fantástico apartamento en Casa Otal, la primera salida que hicimos en bicicleta fue la vuelta a Oroel. 



Desde el mismo apartamento salimos y aunque hay que cruzar unos quilómetros algo caóticos de tráfico, se hace rápido y en seguida llegamos a la carretera de subida que nos llevaría a su parador. Si está abierto, no os podéis perder sus migas!

Aquí todo adquiere otra dimensión. Dejas la ciudad atrás y enfrente siempre ella, imponente con sus 1769m y cambiante a cada curva, nunca te deja indiferente, la mires como la mires. La carretera es amable, disfrutona y sin nada de tráfico o muy poco. El día, aunque caluroso, también nos dio tregua y la verdad que lo único que hicimos fue disfrutar de la salida. Una foto aquí.... otra allá... Si te gusta la fotografía es un sinvivir! A ratos con bosque, otros con miradores infinitos a la ciudad...

Una vuelta circular preciosa que hay que repetir! 

 





SALLENT DE GALLEGO Y EL EMBALSE DE LANUZA








En esta ocasión nos desplazamos en coche hasta Sallent de Gallego. No estábamos seguros de sí podríamos o no salir en bici, ya que estaba el día muy tapado y anunciaba lluvia. Dejamos el coche en el centro, a lado de una fantástica panadería...si, si, ya veis que si hay pastelería cerca, no podemos resistirnos. 


Café para llevar y pasta de hojaldre con chocolate....Y 15 minutos después, salimos dando un paseo por el pueblo hasta coger la carretera que seguía el embalse hasta llegar a Lanuza. 

No podéis negar que el paisaje es espectacular!!!! 

Y visita a Lanuza... 

En esta ocasión la salida fue corta ya que la bajada de temperatura no acompañaba. Pero como siempre, se disfrutó de lo lindo! 





 H
ECHO Y BAÑO EN EL RÍO

Nunca sale como imaginas. Hacía un día fantástico, con un sol radiante y un calor agradable. Habíamos decidido ir hasta Hecho e incluso a la vuelta, quizá pasar por Jasa. Pero vamos al inicio. 


Llegamos a Puente de la Reina. Si, hoy también salimos en coche desde Jaca hasta aquí. Desayunamos como viene siendo tradición, segundo café con leche del día y esta vez, pasta de chocolate. Y entonces, con las reservas cargadas de azúcar, salimos dirección a Hecho. 

La carretera, aun siendo una principal, dispone de un buen arcén y el tráfico no era muy fluido. Pero después de pasar Javierragay y Embrún, la cosa cambió. Llegó la hora de los camiones de reparto, autocaravanas, un montón de coches...y la verdad, acabamos en Hecho un poco agobiados. A la cantidad de tráfico, se le sumó un viento de cara, como siempre, bastante molesto. 

Entonces decidimos dar la vuelta y no seguir más arriba. Como os he contado al principio, estos días en Aragón eran para disfrutar, relajarnos y no había ni planes ni metas. 


A la vuelta, por la misma carretera, y bastante acalorados, decidimos coger el desvío hacia Jasa y hasta donde llegáramos. La verdad que fue muy agradable, porque pese al calor, no había tráfico, teníamos todas las curvas para nosotros solos y la carretera va bordeando el río, cosa que le da cierto encanto pirenaico. Y que además, nos permitió darnos un baño en cuanto encontramos una pendiente directa a él. Ni cortos ni perezosos, allí que nos metimos....Un precioso Spa natural que nos refresco y divirtió un buen rato y al mismo tiempo, hizo que la vuelta a Puente de la Reina fuera más amena y agradable, olvidándonos del agobio de la ida, camiones y viento. 


 
JACA Y ALREDEDORES


Rutas hay infinitas y nosotros que somos culos inquietos, aunque hubo días de todo. Salidas más largas como las que ya os he contado, y otras más cortas como salir de Jaca hasta Navasa, Navasilla, Sabiñánigo...e incluso, salir sin bici.
 

Sí, salir a pasear por la ciudad de Jaca también se ha disfrutado. Comer en La Masía, cenar en el Pirineos, tomar un helado en Elarte o simplemente pasear por sus calles y comercios mientras haces la compra. Otro lugar que no os podéis perder y os animo a visitar, es su Ciudadela. Yo llevaba el mejor guía pero os recomiendo la visita guiada y que os expliquen cada rincón, que merece la pena conocer su historia. 

 

Y así terminan unas fantásticas vacaciones de verano, dando paso a nuevas aventuras, nuevos proyectos y una larga lista de deseos que trabajaremos con intención para que se conviertan en metas

Bienvenido Septiembre!

  

sábado, 21 de agosto de 2021

La Loire à Vélo (Stage 6.- Orleans - Blois) C'est fini!

El día empezó con otro ritmo...Todo era mucho más tranquilo. Quizá porque ya sabíamos que la ruta estaba hecha. El día de hoy era un regalo. Un quitarnos la espina de poder completarla y el mal sabor de boca del primer día. 

El Albergue Juvenil de Orléans está muy bien. Tranquilo, silencioso y con un gran garaje para guardar las bicicletas. El desayuno como siempre, completo y abundante. Nos despedimos de Antoine deseándonos buena ruta y deseando, algún día, volver a verle. 

Al ir sin prisa, y poder disfrutar del sol de la mañana,  salimos
del Albergue con las bicis y todo montado y nos fuimos a visitar Orléans. Encontramos uno de los gatos de los tejados de Monsieur Chat!!! Un par de vueltas por las calles del casco antiguo y emprendemos la ruta. 

Rodamos con la sonrisa puesta, disfrutando sin prisa del trayecto, ya no hay meta. Cuando lleguemos a Blois todo habrá terminado y daremos inicio a una nueva aventura. Y aun que somo culos inquietos, en el fondo, terminar unos días tan fantásticos nos daba un poco de pena....El Loira, sus pueblos, su gente, y mil anécdotas nos habían dejado huella...

Un par de hora después, llegamos a Meung-sur-Loire, nos pareció un bonito lugar para hacer una parada. Encontramos una cafetería enfrente de la iglesia en plena plaza del centro. Después de un café y la que seria la última pasta de hojaldre francesa, compramos un poco de fruta y seguimos hacia Blois.  

A unos 20 quilómetros de la llegada, encontramos un desvío hacia el Castillo de Chambord. Era uno de los anotados para visitar el primer día, así que como íbamos muy bien de tiempo, decidimos salir del track e ir hacía allí siguiendo las indicaciones. Resulta difícil perderse ya que además de los carriles bici bien indicados, hay abundantes letreros con información, aunque no siempre fieles a la realidad...Pero al final, puedes ir enlazando uno con otro. 

Durante unos minutos nos arrepentimos de habernos desviado. No quedaban muy poco para llegar y ahora representaba hora y media más...En cuanto llegamos a la entrada del castillo, se nos quitó!!! Es impresionante! Sin duda, de los imprescindibles si visitas los Castillos del Loira. 

"El castillo de Chambord es una de las construcciones más singulares, legadas por el siglo del Renacimiento La arquitectura es una acertada mezcla entre los elementos tradicionales de la arquitectura medieval francesa y aquellos procedentes del Renacimiento italiano"

La entrada a través de una larga carretera recta con el castillo al fondo ya te presenta lo que vas a encontrar. Una vez en la entrada de los jardines el Castillo de Chambord es majestuoso. Estuvimos un buen rato paseando por ellos, por los traseros y por la entrada principal al castillo, que aquí si hay que pagar para entrar en él. 

Y ahora sí, rumbo a Blois directos! 

En una hora llegamos al párquing. 

Y después de celebrar la llegada a meta, tocaba cargar bicis, bolsas, cambios de ropa....y despedirnos felices pero con esa emoción y tristeza de finalizar un proyecto que empezó de casualidad, para atar otros mayores que finalmente no pudieron realizarse y que no imaginábamos lo que nos iba a dar el Loira. 

Semanas después seguimos recordando anécdotas....Personas como Serge, Romain, Pascal, Laure y Antoine... La gastronomía...Sus vinos.... y las risas que nos provoca recordar algún que otro susto, que también los hubo... 


Y por supuesto doy las gracias a Alfons por ser el mejor compañero de aventuras y hacer que un plan de última hora, haya resultado perfecto. Como en cada entrada os invito a visitar su blog  La Vida es mejor sobre dos Ruedas y leer las mismas aventuras desde su vivencia. 

Qué sería de mi sin tu orientación?! Jajaja

Solo te puedo decir: - Próximo destino??

miércoles, 18 de agosto de 2021

La Loire à Vélo (Stage 5.- La Possonnière - Nantes)



La Possonière. 
07:00h de la mañana.
 Suena el despertador y como siempre, el ritual es mirar por la ventana para ver cómo está el cielo.  

Bien, sol hoy también.

Lo preparamos todo, nos vestimos con la ropa de ruta y bajamos a desayunar. Increíble! Laure nos ha puesto unas tazas enormes, la culpa es mía ya que le dije que tomábamos mucho café…Son preciosas, con forma de amapola. En cuanto le digo lo bonitas que son, me cuenta que esas tazas tienen 100 años… la suelto de inmediato y no penséis que tomé el café con leche cómodamente, la tuve cogida más fuerte de lo normal…

Para desayunar, además del café, zumo de manzana, mermelada de higos casera, croissants, baguette (no sabéis como echo de menos las baguettes, no tienen nada que ver con las de aquí) miel, Nutella, yogur y cereales. Charlamos animadamente con Laure durante el desayuno y de las cuatro pinceladas que intercambiamos de nuestras vidas y aficiones, cabe decir que es una mujer valiente y luchadora. Si tenéis oportunidad y pasáis por La Possonière, no dudéis en alojaros en Loge & Broc.

Hoy llegamos a Nantes. Final de ruta. Resulta extraño que ya se esté terminando la aventura. El hecho de no haber podido hacer la primera etapa, nos tiene un poco mosca…

Aun así nos concentramos en la etapa de hoy, ya que tenemos muchos quilómetros por delante y conocer la ciudad, Nantes. 

Os recuerdo que todas estas historias y más las podéis leer el blog de Alfons La Vida es Mejor sobre dos Ruedas

Salimos en busca de la ruta y a pocos quilómetros nos ponemos sobre track. Poco a poco, dejamos viñedos atrás para volver a rodar paralelos al Loira. Volver a cruzar encantadores pueblos, con sus puertos y sus espectaculares Boulangeries.

En esta ocasión hicimos nuestro parada "dulce" en Saint Florent le Vieil, una cuesta increíble terminaba en una plaza con unas vistas espectaculares del Loira, el castillo local, la iglesia y un gran valle al otro lado. En la salida del pueblo encontramos una pastelería espectacular y como todos los días, probamos especialidades locales, diferentes a las ya vistas los días anteriores. Café, y seguimos! 

La entrada a Nantes era increíble! Una avenida peatonal y con carril bici, el Loira y un gran puente que comunica las dos orillas, nos daba la Bienvenida! Que nervios, llegábamos a la meta después de 5 días!!!















Pues no! Un caos! 

La llegada al centro fue horrible. Calles levantadas en obras, con máquinas trabajando por todas partes. Desvíos que nos volvían locos y que para los ciclistas no estaban bien delimitados. De calma total pasamos en 10 minutos a ritmo de vértigo. 

Llegamos a una calle principal para sentarnos a comer algo y buscar un hotel. Tres restaurantes después, ya que todos tenían el servicio de cocina cerrado, acabamos en un fast food de hamburguesas...No era el fin de viaje que esperábamos! y de repente, nos miramos y: Nos vamos!? Sí, claro. Vámonos! En una hora y media salía un tren hacia nuestro próximo destino.

En quince minutos estábamos en una lavandería al lado de la estación de tren. Hicimos la colada de todo. Salíamos de Nantes con todo limpio. Y recordáis que empezamos en Blois debido a la lluvia del primer día en Orléans y dejamos el coche allí? 


Pues a veces nos venimos arriba y de repente, empezamos a pensar que por qué no volver a Orléans y terminar la Ruta del Loira entera. Teníamos días de sobra y la meteorología era buena, lo íbamos a dejar con el mal sabor de boca por un día?? 

A las 20:45h llegábamos a Orléans, buscando un hotel y dispuestos al día siguiente, a terminar nuestra particular RUTA DEL LOIRA. 

Encontrar hotel no fue fácil a esas hora. Con anécdotas, que ahora vistas con la distancia, nos hacen partirnos de risa, pero que en su momento no vimos nada claro. Finalmente, acabamos en el Albergue Juvenil de Orléans, donde Antoine, un simpático y amable gallego afincado en Francia, nos atendía fantásticamente bien. 

Este día no hubo pizza, ni paseo, ni nada de nada. Ducha y  Buenas Noches!

miércoles, 11 de agosto de 2021

La Loire à Vélo (Stage 4.- Saumur - La Possonnière)

Saumur

El hecho de que El Patio estuviera en el paseo fluvial, y a unos 5 minutos del centro de Saumur, se notó también a la hora de descansar. Una habitación espaciosa y con mucho silencio, que el único sonido que nos despertó por la mañana fue el canto de los pájaros del propio jardín. 

El desayuno fue fantástico; zumo natural, cereales, yogures, mermeladas y como no podía ser de otra manera, baguette y croissant...Romain, nos explicó lugares pintorescos que nos esperaban en la ruta del día. Lugares donde parar a hacer un buen café o incluso picar algo y algunos de los pueblos con encanto, que podíamos visitar. 

Os animo a visitar el blog de Alfons, La Vida es Mejor sobre dos Ruedas donde encontraréis reflexiones, anécdotas y aventuras de estos viajes y más. 



Castillo de Saumur

Al tener el Chateux de Saumur justo detrás del hotel, decidimos ir a visitarlo antes de irnos. 5 minutos a pie subiendo una larga escalinata y allí le teníamos. Los jardines se pueden visitar sin pagar entrada y aprovechamos para hacer unas fotografías tanto del castillo como de sus vistas desde este punto, donde se puede ver la ciudad entera como no, con el Loira a lo largo de ella. Un lugar al que sin duda, quiero volver!


El Patio 



Dejamos Saumur atrás emocionados del día tan fantástico que habíamos tenido. Eso a veces, es una arma de doble filo ya que creas expectativas. La salida de Saumur fue buena, de momento era fácil, sin mucho tráfico, con una buena carretera y bien delimitada. Nos habían aconsejado un par de restaurantes sobre el Loira para hacer un café y un par de horas más tarde encontramos el primero, cerrado. 



La Route du Sel
Seguimos adelante positivos, era muy temprano y el segundo café del día podía esperar unos quilómetros más. Y así fue. Buena opción esperar. Entramos en una bonita comunidad marítima, Le Thouriel. Como todos, era muy pintoresco, pequeño, ese estilo de casas francesas tan romántico "trés jolie", pequeñas barcas amarradas a embarcaderos flotantes y entonces encontramos La Route du Sel, Restaurant Bar à Vins. Aunque la tentación era muy grande ya que en su carta tiene unos platos con una pinta estupenda, solo tomamos un café.  


Seguimos en ruta a través de campos de viña. Las carreteras estaban vacías por lo que el día fue muy tranquilo. Al no encontrar ningún lugar pintoresco en el que parar a comer algo, seguimos adelante haciendo alguna parada para comer alguna barrita, frutos secos...Sin darnos cuenta, entre charla, risas y dejarnos llevar por el paisaje, nos pasamos Trelazé y también Angers. Cosas que pasan!!! 


Decidimos hacer más quilómetros y así al día siguiente que la ruta era larga, ya los tendríamos avanzados. Llegamos a Savennières. Encontramos una panadería que justo abría, eran las 17h de la tarde ya. Compramos una empanadilla con más concepto árabe que francés, y preguntamos por algún hotel, camping o casa de huéspedes. 

Fanstástica equipación de https://sigr.cc/

18h.- No encontramos nada. Seguimos adelante y llegamos a La Possonière y al salir del pueblo, encontramos un pizzería llamada Piano Piano, de la que salía un señor al que le preguntamos si sabía de algún lugar para pasar la noche. Pascal resultó ser el propietario del restaurante y muy amablemente nos hizo pasar y se puso al teléfono. Después de unas cuantas llamadas, teníamos hotel. Gracias Pascal!!!

Loge & Broc resultó ser una casa de huéspedes fantástica. Casa típica francesa, con un jardín inmenso y un anexo que era el taller de Laure, la propietaria. Además de alquilar habitaciones, realiza pieza de cerámica, tapicerías y unos artículos de piel increíbles. La casa es un museo de antigüedades...No hay un rincón donde no tenga un jarrón, vajilla o incluso las sillas de época. 


Loge & Broc

Llegamos muy cansados. Con frío. Ganas de ducha y comer algo. Laure nos recibió muy amablemente, dándonos un lugar para las bicis y llevándonos a nuestra habitación. Preciosa, coqueta, a conjunto de la decoración  y en la buhardilla de la casa. Después de una ducha caliente todo adquirió otro color. Laure nos esperaba con una copa de vino de bienvenida de la zona, un Muscat delicioso. También nos preparó algo para picar; quesos y embutidos acompañados de la deliciosa baguette francesa. 

El resto de la tarde lo pasamos en el jardín. Una mesa de ping-pong nos hizo olvidar el cansancio y continuar con las risas y anécdotas del camino. 

Sin duda, no fue uno de los mejores días en cuanto a ruta, bastante plana en cuanto a paisaje, pero quizá de las más rica en anécdotas. Infinitamente agradecidos a Pascal por ayudarnos tan amablemente y Laure por el afecto recibido durante la estancia. 

martes, 3 de agosto de 2021

La Loire à Vélo (Stage 3.- Tours - Saumur)

La ruta que os voy a contar hoy, para mi fue la estrella del viaje. Es la tercera etapa, la primera fue cuando salimos de Orleans a Blois (Stage 1), la segunda de Blois a Tours (Stage 2), os lo recuerdo por si queréis echar un vistazo y también podéis leer estas aventuras y mas en el blog de Alfons Life Is Better On Two Wheels. 

Tanto por el día que nos hizo, las carreteras, pueblos visitados, gente y como guinda del pastel, Saumur! Un lugar maravilloso! y el hotel que encontramos aquí junto al Loira, en una casa del siglo XVIII y su propietario, el Sr. Romain, lo hicieron mágico! El Patio Bed&Breakfast

Nos levantamos temprano, como siempre, y lo primero al poner los pies en el suelo, es mirar por la ventana para ver que día hace. Tours se levanta con un cielo azul, limpio y un sol precioso!!! 

Bajamos a desayunar al salón-recibidor del The People Hostel -Etape 84- y en la recepción ya tienen nuestras bolsas con el desayuno preparado. Pedimos café y un zumo. Hay que decir que debido a las medidas Covid, en todos los hoteles que hemos estado, los buffet libre están detrás de un mostrador y es un camarero quien te sirve, tantas veces como quieras, pero no se puede tocar nada. Os recomiendo este Hostel 100%; situación, comodidad, personal, precio....de 10!

Recogemos las bicis y rutina; montar el bikepacking, repasar aire de las ruedas y hoy, ponemos un poco de cera....En ruta! 

La salida de la ciudad es fantástica! Es muy temprano y apenas hay tráfico, tampoco importa mucho porque hay un carril bici estupendo, pero además, tenemos la suerte de que la ruta cruza un parque en el que no podemos evitar pararnos a hacernos unas fotos con el Loira y Tours de telón de fondo. Sin duda, no podíamos tener una despedida mejor!


Salimos dirección Saumur!

Aun que brilla el sol, hace fresco y seguimos con un jersey de manga larga. Dos horas más tarde llegamos a Savonnièrs, un precioso pueblo, pequeñito como vienen siendo todos los que encontramos sobre la ruta. Encontramos una panadería espectacular y hoy toca probar el eclair de café y una pasta de hojaldre rellena de chocolate, buenísima! Cogemos un café con leche para llevar y allí mismo, en la barandilla que separa el Loira del paseo, entre unos árboles y bancos, nos sentamos a disfrutar del momento. Casi todos estos lugares tienen pequeños puertos con unas barcazas, y pasarelas donde la gente se sienta a pescar. El caudal del agua es abundante, y con fuerza. Siempre se ve el agua removida y mucha alga...

Aprovechamos para cambiarnos y ya ponernos de manga corta que empieza a apretar el calor. 

Unos quilómetros más adelante, la siguiente parada es un pueblo parecido al anterior, Rigny-Ussé. Aquí en cambio, hay muchísima gente, turistas, ya que tiene un grandioso castillo llamado Le Chataux d'Ussé. Decidimos no entrar ya que estamos a mitad de la ruta y entrar supone perder un par de horas, al menos. 

Seguimos con los letreros de Le Loire à vélo! y en un cruce nos da dos opciones, seguir por la riba del Loira o ir a través de los viñedos. Estamos en una región muy rica por sus vinos y también, cervezas artesanales. Decidimos salirnos del track y arriesgar por los viñedos, solo cambiaba unos diez quilómetros, y nos apetecía ver algo diferente al rio. 

Acertamos. La carretera era más que secundaria, muy tranquila, amplia y con campos de viñedos y grandes casas que parecían postales. El único pero, por ponerle alguno, fue que de los 400 metros de desnivel que se hacían en esta jornada, 300 los hicimos en estos últimos 10 quilómetros. Y cuando ya llevas 75 en las piernas....pues como que no apetecen jajaja  Aún así, mereció la pena. 

Una hora más tarde, entramos en Saumur. Paramos en la entrada para buscar un hotel y hacia allá que fuimos. 

Saumur es una ciudad relativamente tranquila, con una gran avenida repleta de comercios y al final de ella, enfrente del Loira, una gran plaza con un precioso paseo fluvial. Y aquí, en este mismo paseo estaba El Patio, el hotel del que os he hablado al principio. Echadle un vistazo, es espectacular!



Romain, el propietario, después de acomodarnos nos indicó los mejores sitios para tomar algo y cenar. También que nos aconsejó que nos dejáramos llevar por sus calles peatonales. Así elegimos La Tonnelle, una bonita bodega con terraza donde tomamos un vino de la región y unos deliciosos quesos. 



Hora y media más tarde, y después de visitar el paseo, el puerto y algunas calles más con sus comercios, escogimos el primer restaurante que nos recomendó Le Bistrot de la Place, en la misma plaza de St. Pierre. Con una bonita terraza, pudimos cenar al fresco y probar más productos típicos de Francia. 



Y así terminó la que fue una de las mejores jornadas. Meteo, ruta, hora de llegada....

-