Los municipios de Deltebre (Baix Ebre) y Sant Jaume d'Enveja (Montsià) son las dos poblaciones más importantes construidas en terrenos del Delta. Entre los dos nucleos urbanos hay una distancia de 2 km separados por los 200m de anchura del rio Ebro que ha significado una barrera histórica durnate muchos siglos, ya que solo se podía cruzar los trasbordadores que siguen funcionando en la actualidad.
El primer puente que se construyó sobre el Ebro fue el de Tortosa en el siglo XIX y después el de Amposta en 1920. Estos dos puentes y los más pequeños que se habían construido quedaron destruidos durante la Guerra Civil, aunque poco a poco, se volvieron a construir con técnicas menos costosas y más fáciles.
Para los habitantes de Deltebre i St. Jaume d'Enveja era una necesidad que se construyera este puente, ya que, para ir de una localidad a otra, debían de ir hasta Amposta, eso suponía dar una vuelta de 13 km.
En 2007 la Generalitat de Catalunya aprovó un presupuesto de casi 20 MEUR para que las obras empezaran ese mismo año y terminaran en 2009.
Los ingenieros Diego Cogo y Jiri Strasky, de la empresa Tec-4, diseñaron un puente de 250 m de largo y 19 m de ancho, con una plataforma central de 8 m para vehículos a motor de dos carriles, y un espacio casi tan ancho como este, para peatones y carril bici. Además dispone de unos bancos y miradores para contemplar el Ebro. En cuanto a características más técnicas, se tubo en cuenta la circulación de embarcaciones por debajo de puente así tiene una distancia de 12 m entre la parte inferior del puente i el nivel medio del río, y de 56 m en el tramo central. Los dos pilares centrales se hunden 45 m debajo del río, concentran el peso de la estructura a través de unos cables metálicos, esto ha permitido ahorrar la construcción de otros pilares.
El 30 de septiembre fue inaugurado por el entonces presidente de la Generalitat José Montilla. Y mientras que para dos poblaciones significaba un avance importante, para las muchas pequeñas empresas de transbordadores este puente supuso el cierre de su actividad, y a día de hoy unas pocas han mantenido su actividad a modo de atracción turística.